En esta ocasión no te voy a hablar del libro. Si quieres saber sobre la obra, puedes leer lo que escribí hace unos meses, al final de esta entrada. Prefiero contarte ahora otras cuestiones.
Por ejemplo, que la portada imita varios textiles, en una mezcla interesante. A simple vista muchas personas pueden pensar que son telas del continente africano. Sin embargo, ¿son todas africanas?, ¿o estamos reduciendo, poniendo una etiqueta a algo que suponemos tiene que ser así?.
También me parece interesante conocer que Kwame Anthony Appiah, es un cruce de caminos. Su madre es inglesa, su padre es ashanti, ghanés. Más allá, su padre era metodista y su madre anglicana. Es filósofo, periodista, profesor universitario y novelista. Ha vivido en Ghana, en Inglaterra y en Estados Unidos. Es culto, erudito hasta decir basta. Antes, publicó Cosmopolitismo: la ética en un mundo de extraños, en el que incide en la idea de la coexistencia.
Appiah frente al multiculturalismo, defiende el cosmopolitismo.
Sus ideas pueden hacer moverse muchas cabezas, ya que tocan temas candentes sobre lo que somos, o sobre lo que creemos que somos.
Su último libro traducido a castellano y escrito en 2016 Las mentiras que nos unen es un obra que gira entorno a la idea central de echar por tierra un error en el que solemos caer: «el de dar por hecho que en el corazón de cada identidad residen unas similitudes profundas que vinculan a todas las personas que comparten dicha identidad».
Como afirma Arlie Russell Hochschild: «Appiah nos invita a ceder ante la difícil tarea de vivir con complejidad».
Repensar las identidades: el reto que nos propone Kwame Anthony Appiah
El libro ‘Las mentiras que nos unen’ invita a más de una reflexión sobre quiénes somos, una cuestión central y muy viva en el mundo global
¿Nos preguntamos quiénes somos? o ¿preferimos continuar el camino sin reflexionar ni cuestionarnos nada? ¿Practicamos lo de “pensar por uno mismo”? o ¿nos dejamos guiar por ideas preestablecidas? ¿Qué hay de cierto en lo que creemos que nos une a “los nuestros”?… y, más allá, ¿quiénes son “los nuestros”?
Para leer el resto del artículo en el blog «África no es un país»
Estoy totalmente de acuerdo en asumir la complejidad y dejarnos de simplificar.
Es un placer leerte.
Alberto Mrteh (El zoco del escriba)
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